Diseño industrial de depósito para industria alimentaria

Deposito inox

Diseño industrial de depósito para industria alimentaria

El empleo de acero inoxidable para la realización de depósitos se debe a su excelente resistencia a la corrosión. Por eso es el material más demandado en sectores industriales como el alimentario y el farmacéutico. Además permite una limpieza y desinfección sencilla, por lo que se convierte en imprescindible a la hora de diseñar una línea de producto. Dentro de los aceros inoxidables hay que diferenciar el AISI 304, que es resistente a la corrosión originada por la mayoría de alimentos y limpiadores y es más barato, aunque reacciona con el dióxido de azufre. Por tanto en vinos y mostos con un grado superior a lo 70 mg/l de SO2 es necesario optar por acero inoxidable AISI 316.

Si los materiales que vamos a almacenar en el depósito puedan producir corrosión con alimentos ácidos o salmueras, debe fabricarse integramente con AISI 316. En ningún caso deben pulirse los cordones de soldadura con abrasivos que contengan hierro, ya que se puede provocar la aparición de óxido, lo que no es aceptable en depósitos para la industria alimentaria.